Prevención de lesiones (Parte 3)
En esta tercera parte, vamos a profundizar más si cabe en la consideración del por qué el entrenamiento de nuestros caballos debe de ser :
Variado, sistemático, metódico y completo.
El entrenamiento de cualquier disciplina deportiva debe de abarcar la totalidad de las habilidades físicas, perceptivo-motrices y resultantes. Denominamos habilidades físicas a la fuerza, velocidad, resistencia y flexibilidad. Las perceptivo-motrices es la propiocepción, uno de las grandes desconocidas del entrenamiento equino y que, estando relacionada con la coordinación, simetría y equilibrio, es imprescindible en cualquier plan de entrenamiento y la dejaremos para un post independiente. Por otro lado, tenemos a las habilidades resultantes, que no es más que la práctica de una disciplina deportiva en sí misma. Es frecuente, que el entrenamiento de un caballo se base, casi por entero, en la mera práctica de una disciplina deportiva en concreto. Si vemos que esto, no es más que la tercera parte de lo que debería de ser un entrenamiento completo, ya podemos extraer las primeras consecuencias: si solo entrenas a tu caballo de doma practicando doma, te estás dejando más de la mitad de las opciones a realizar, más de la mitad de rendimiento deportivo e introduciendo una gran cantidad de probabilidades de lesiones.
Sé que en este punto estarás pensando que si no trabajas a tu caballo en esta u otra disciplina 6/7 días a la semana no conseguirás los hitos técnicos que te has marcado en el camino. Sin embargo, déjame decirte que estás equivocado por extraño e ilógico que te parezca…y no lo digo yo, lo dicen varios estudios de los grupos de investigación más avanzados en etología equina. Son varios los estudios que han demostrado que la alternancia de entrenamiento de diferentes habilidades (es decir, rotar y alternar entre fuerza, flexibilidad, resistencia, técnica…etc), si bien puede demorar alcanzar unos determinados objetivos en el tiempo se produce un interesante fenómeno: los objetivos marcados se obtienen en menor número de sesiones totales. Es decir, si en lugar de hacer 7 días a la semana de práctica exclusiva de tu disciplina, dejas la práctica de ésta reducida a 2-3 sesiones a la semana y en el resto de días introduces un día de entrenamiento de flexibilidad, otro de resistencia, otro de series de fuerza y velocidad y otro de propiocepción por ejemplo, pensarás que con solo dos días de trabajo técnico vas a tardar 3 veces más en conseguir tus objetivos. Pues no, los caballos que realizaron este experimento, tardaron algo más de tiempo que cuando los comparabas con el grupo que solo trabajan la habilidad técnica, sin embargo, era solo un poco más de tiempo y por el contrario registraron unas tasas de lesiones, aburrimientos, problemas comportamentales y síndromes de sobreentrenamiento muy inferior. Curioso, ¿verdad?. En este punto es muy interesante el dato acerca de la menor tasa de lesiones. Acerca de este dato, sabemos que para que exista progresión en el entrenamiento físico han de producirse microlesiones en estructuras como ligamentos y tendones, de cuya reparación exitosa proviene la progresión en el entrenamiento equino. En este sentido, sabemos que para que tendones y ligamentos se recuperen de una sesión de trabajo físico activo se necesita en torno a 48-72 horas de descanso activo, es decir, no estoy hablando de reposo absoluto confinando a tu caballo en un box, estamos hablando del momento ideal para que se siga moviendo en forma de paseos, series de resistencia cardiovascular, entrenamientos de flexibilidad y propiocepción por ejemplo.
Esto es precisamente a lo que me refiero cuando hablo de que sea variado, completo y sistemático, al hecho de considerar que alternar muchos tipos de entrenamientos, y no solo los técnicos, convierte a tu entrenamiento en eficaz y eficiente, no solo para conseguir tus resultados deportivos sino para evitar lesiones. Y sé que en este punto, puede que te estés planteando por qué considerar la flexibilidad si mi caballo es de raid o la resistencia cardiovascular si entreno doma clásica…iremos hablando todo ello en los post respectivos del entrenamiento de cada una de las habilidades físicas.
Lo que sí considero importante llegado a este punto es un aspecto frecuentemente olvidado: aún y entendiendo las ideas que te he ofrecido, vas a necesitar un planning o calendario de trabajo para anotar y organizar en el tiempo los entrenamientos de tu caballo. Estoy cansado de ver como hasta los más profesionales, no siguen ningún planning más que el feeling directo de sus experiencias montadas y el calendario oficial de competiciones que les marca la necesidad de que su caballo haga esto o lo otro. Necesitamos organizar todo estos tipos de entrenamiento de nuestros caballos en el tiempo de manera que la combinación entre ellos no sea al azar sino buscando las mejores sinergias entre todas las habilidades. Necesitamos además, llevar un diario de anotaciones con nuestro feedback de los diferentes días, para que así, pasado el tiempo, ante la más mínima eventualidad o problema podamos revisar nuestros registros y tratar de ver asociaciones que nos conduzcan hacia la causa.
Referencias: